Hay vestigios de que este territorio estuvo poblado desde hace más de 15 mil años, por tribus nómadas. La existencia permanente de agua para pescar, beber y cazar en sus fangosas orillas a los animales que se entrampaban al procurar saciar su sed, el clima templado y la mayor abundancia de frutos debida a la misma humedad ambiental, resultaron muy favorables para la vida de aquella remota gente.
En el año 618 de nuestra era, la expansión cultural tolteca llega hasta la región de Xalisco. En 1325 se funda la localidad de Ameca que enfrenta las constantes invasiones de los tarascos, cuyo dominio se hace patente en toda la zona. En 1510 los indígenas de Zapotlán, Sayula y Zacoalco con la ayuda de los colimenses, dejan de ser tributarios de los michoacano-tarascos, al triunfar en la guerra del Salitre.
En 1522 Cristóbal de Olid incursiona por Mazamitla y Tamazula en busca de minerales preciosos. En 1524 Francisco Cortés de Buenaventura explora el valle de Autlán. Alonso de Ávalos recibe en encomienda la región sur de Jalisco hasta la ribera meridional de la laguna de Chapala, así como Cocula, Zacoalco y Sayula. En 1529 el presidente de la Audiencia de México, Nuño Beltrán de Guzmán inicia la conquista de la región jalisciense, que integra junto con Nayarit, Colima y Michoacán la región llamada «Conquista del Espíritu Santo de la Mayor España». En 1531 Juan de Oñate, por órdenes de Nuño Beltrán de Guzmán, funda la villa de Guadalajara en el actual Nochistlán, interesado en fomentar la comunicación con el Pánuco. Una real cédula dispone que la región se llame provincia o reino de Nueva Galicia y la capital se establezca en Santiago Galicia de Compostela. En 1541 ocurre una sublevación de indígenas en el norte de Nueva Galicia. Durante las escaramuzas es asesinado Pedro de Alvarado y derrotado Miguel de Ibarra; Guadalajara es asaltada por los indígenas; los cuales finalmente son vencidos en El Mixtón. El 14 de febrero de 1542 la Villa de Guadalajara se traslada a su lugar definitivo en el valle de Atemajac. Se nombran los primeros regidores. El 13 de febrero de 1548, por real cédula del rey Carlos I de España, se dispone la creación de la Audiencia de Nueva Galicia, establecida originalmente en Compostela.
Ya para fines de septiembre de 1809, el «grito de Dolores» resonaba en la Nueva Galicia; dos pequeños grupos sublevados hacían acto de presencia: uno, acaudillado por Navarro, Portugal y Toribio Huidrobo, se desplazaría entre, Jalostotitlán, Arandas, Atotonilco y La Barca; otro, guiado por José Antonio Torres -a quien apodaban «el Amo»-, recorrería Sahuayo, Tizapán el Alto, Atoyac y Zacoalco. El 28 de noviembre los insurgentes de Mercado se emplazaron frente al puerto requiriendo su rendición, lo cual ocurrió tres días después, no obstante que había elementos suficientes para la defensa.
Guadalajara se convirtió en capital del Estado de Jalisco el 27 de mayo de 1824. En 1834 el Congreso jalisciense invita a los de Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí y Michoacán, a formar una coalición que defienda «la independencia, la libertad y la federación» ante los intentos centralistas de Santa Anna.
El 13 de marzo de 1858, Guadalajara se convierte en sede del Poder Ejecutivo, al instalarse ahí, el presidente Juárez y su gabinete. El coronel Antonio Landa, a cargo de la guardia de honor presidencial, apresa al presidente y sus colaboradores. El general Anastasio Parrodi libera Guadalajara y al gabinete presidencial, que parte hacia Colima. El ejército conservador toma Guadalajara.
En 1863 las tropas francesas toman Lagos de Moreno en su camino a Aguascalientes. El 6 de enero de 1864, el ejército francés entra a Guadalajara. En 1866 el republicano Eulogio Parra vence a las tropas francesas en la Hacienda de la Coronilla, cerca de Santa Ana Acatlán. En 1867 el general Ramón Corona toma la ciudad de Guadalajara. Pedro Galván derrota a los franceses en Acatlán, lo que consolida el triunfo republicano. El Congreso de Jalisco restablece el orden constitucional.
En 1888 se inaugura la vía ferroviaria México-Guadalajara. En 1906 se publica la Constitución Política de Jalisco.
Antes de 1908, no hubo en Jalisco una oposición al Gobierno verdaderamente organizada. Más bien se manifestó en reducidos grupos de estudiantes, profesionistas y ciertos mineros y obreros textiles que llevaron a cabo algunas huelgas. En 1910 estalla la Revolución y el 11 de junio de 1911, las tropas maderistas de Ramón Romero entran victoriosas a Guadalajara.
En 1914 los constitucionalistas entran pacíficamente en Guadalajara después de derrotar a las tropas huertistas en Atzatlán, Ahualulco y Ameca. El general Manuel M. Diéguez asume la gubernatura de Jalisco; decreta el salario mínimo y la laicidad de la educación. El 17 de diciembre, el general villista Julián Medina toma Guadalajara. Manuel M. Diéguez instala su gobierno en Ciudad Guzmán. En 1915 Manuel M. Diéguez, toma dos veces Guadalajara y los villistas hacen lo mismo, hasta que finalmente Diéguez se instala definitivamente en el gobierno del estado. En 1924 los rebeldes de la huertistas son derrotados en el lago de Chapala. El gobernador José Guadalupe Zuno regresa a Guadalajara.
Durante el periodo de la Guerra Cristera, en 1926 la Liga de la Defensa Religiosa dirige un boicot contra el gobierno y una huelga de impuestos. El movimiento cristero se expande por varias regiones de Jalisco. En 1927, 13 sindicatos católicos, organizados por el Sacerdote Amando de Alba, se levantan en armas durante la Cristiada.
Después de estos disturbios, Guadalajara se consolida como una de las ciudades mas progresistas del país, consolidándose como la segunda más importante en México.
Fuente: https://programadestinosmexico.com/descubre-mexico/historia/historia-de-guadalajara.html