Que los individuos con escasa habilidad o conocimientos piensen que son más inteligentes que otras personas más preparadas es tan común que ya hubo quien hizo un estudio serio para explicarlo. El resultado de este estudio se llama “Efecto Dunning-Kruger”
Tal vez el ejemplo más conocido de alguien que sufre este efecto es el personaje de Dragon Ball Mr. Satán.
¿Quién es Mr. Satán?
Míster Satán es uno de los personajes de la serie de manga y anime Dragon Ball en la cual es un hombre arrogante, presumido, fanfarrón, manipulador y con delirios de grandeza por lo cual tiende a justificar sus carencias con toda clase de ocurrencias, pretextos y mentiras para encubrir su poca capacidad cuando se da cuenta que su oponente es más fuerte que él. Mr. Satán hace creer a los humanos que él es el hombre más poderoso del mundo cuando en realidad solo está un poco arriba del promedio.
¿Qué tiene que ver Mr. Satán con el Efecto Dunning-Kruger?
El efecto Dunning-Kruger es un sesgo cognitivo, en el cual los individuos con escasa habilidad o conocimientos tienen un sentimiento de superioridad falso, considerándose más inteligentes que otras personas más preparadas, pues sienten que su habilidad está muy por encima de lo que verdaderamente es. Este sesgo se explica por la incapacidad que tiene la esa persona para reconocer su propia ineptitud.
¿Qué significa sesgo?
Sesgo significa unilateral, carece de un punto de vista neutral o no tiene una mente abierta. El sesgo puede venir en muchas formas y está relacionado con el prejuicio. Las personas pueden desarrollar sesgos a favor o en contra de muchas cosas como de un individuo, un grupo étnico, una identidad sexual o de género, una nación, una religión, una clase social, un partido político, etc.
¿A qué se debe este efecto?
Se debe a que quienes están menos cualificados en un campo ni siquiera tienen la experiencia necesaria para saber lo que están haciendo o diciendo mal. A esto se le suma que una mente “ignorante” no está vacía, sino que está llena de ideas preconcebidas, experiencias, hechos, intuiciones, sesgos y corazonadas, además de conceptos que importa de otros campos del conocimiento y con todo eso construye historias y teorías que le dan la impresión de tener un conocimiento fiable.
¿Y los que sí saben?
Por el contrario, los individuos altamente cualificados tienden a subestimar su competencia relativa, asumiendo erróneamente que las tareas que son fáciles para ellos también son fáciles para otros.
David Dunning y Justin Kruger de la Universidad de Cornell creadores del estudio concluyen que:
El incompetente: La sobrevaloración del incompetente nace de la mala interpretación que hace de la propia capacidad.
El competente: La infravaloración del competente nace de la mala interpretación que hace de la capacidad de los demás.
Es decir: La mala medición del incompetente se debe a un error sobre sí mismo, mientras que la mala medición del competente se debe a un error acerca de los demás.
¿Cómo se realizó la investigación?
Se practicaron un total de cuatro investigaciones distintas, tomando como muestra los estudiantes de la Facultad de Psicología de la Cornell University. Se estudiaron principalmente la competencia de los sujetos en los ámbitos de la gramática, el razonamiento lógico y el humor.
A los Participantes del estudio se les preguntó, uno por uno, acerca de cómo estimaban su grado de competencia en cada uno de los ámbitos anteriormente nombrados. Posteriormente, se les hizo responder un test escrito para comprobar su competencia real en cada uno de los ámbitos.
Se recogieron todos los datos y se procedió a comparar los resultados, para observar había correlación. Y claro que sí se encontraron correlaciones muy relevantes.
Los investigadores se percataron que cuanto mayor era la incompetencia del sujeto, menos consciente era de ella. Por contra, los sujetos más competentes y capacitados eran los que, paradójicamente, más tendían a infraestimar su competencia.
Podemos decir que las personas incompetentes:
1. Se muestran incapaces de reconocer su propia incompetencia.
2. Tienden a no poder reconocer la competencia de las demás personas.
3. No son capaces de tomar consciencia de hasta qué punto son incompetentes en un ámbito.
Entre más incompetente más chido de cree
Volvemos con Mr. Satán cuando se le puso al tiro al Cell, habló mucho, hizo muchos movimientos, pero fue fácilmente derrotado en el campo de batalla.
También podemos observar este fenómeno cuando los expertos en alguna materia ofrecen opiniones y consideraciones mesuradas sobre algún problema, mientras las personas ignorantes en el asunto creen tener respuestas absolutas y sencillas a las mismas cuestiones.
Para finalizar te dejo algunas frases
Seguro que conoces a una de esas personas que creen saberlo todo, pero que en realidad no tienen ni idea de lo que hablan. Además, a pesar de su ignorancia, defienden de forma escandalosa sus pendejadas.
“Saber que se sabe lo que se sabe y que no se sabe lo que no se sabe; he aquí el verdadero saber.”
(Confucio)
“El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona.”
(Aristóteles)
Una de las cosas dolorosas de nuestro tiempo es que aquellos que sienten certeza son estúpidos, y aquellos con alguna imaginación y comprensión están llenos de duda e indecisión.
Bertrand Russell
Este efecto parece pronunciarse más cuanto menos conocimiento o habilidad se tiene de algo. Cuanto más estudia o más conocimientos tiene una persona, más consciente es de todo lo que le queda por conocer. De ahí el «solo sé que no sé nada» de Sócrates.
Sócrates.